martes, 10 de julio de 2012

Ana Narbona en Cibeles

Yo estuve en Cibeles y siento este cuarzo rutilado ligado al que lleva Enric y pone delante de sus cuencos. Es la única piedra que me llamó en Finisterre y al final no me la pudo enseñar. Cuando vino a Madrid el sábado pasó por casa y trajo su cuarzo rutilado, es la antítesis del mio, el suyo casi todo cuarzo transparente con unas cruces dentro y el mio ovalado, aun con estrías y lleno de planos y subtancia en su interior, plagado. Nos enseñamos las respectivas piedras. La mía la compré en Valencia(Gandia), sitio donde Enric estará haciendo vibrar mañana. Olivia y yo hicimos un hoyo en un árbol cerca del sauce de la Cibeles y cuando cavábamos en el centro había una piedra que extraje y sentí un relevo. De la antigua forma de enfocar sobre todo la dualidad a una nueva conciencia de unidad de los polos. Colocamos el cuarzo, lo cubrimos de tierra y le echamos aguita, mi hija dijo de regarlo. Luego nos quedamos al ladito como una hora más tan a gusto, mi hija leyendo y yo sintiendo. En un momento dado sentí que se activaba el cuarzo con el impulso del corazón y se ponía a expandir junto con mi corazón, ondas y ondas, mi hija me llamó:
" Mamá..mira, me ha cagado un pájaro"
Olivia llevaba una camiseta con un corazón dibujado, justo el el centro de arriba del corazón, donde se juntan las dos curvas tenía una cagada seca y perfecta con forma de caracola. Se la quite con una hoja y la dejé de ofrenda encima del cuarzo enterrado.
Mañana cuando Enric haga vibrar Valencia no estaría mal que conectáramos esa unión de los opuestos de nuestra Diosa Cibeles
En la foto está la piedra extraída junto al cuarzo que situé. Besitos

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